sábado, 25 de diciembre de 2021

Reyes

Hace muchos años que no escribo la carta a los Reyes Magos, a una parte de mí le da pereza, otra pasa totalmente del tema, otra, cree que es mejor regalar a pedir. Sin embargo, después de tanto tiempo, se me han acumulado los deseos, y este año, he cogido papel y boli...

Porque para mí, mi mejor regalo es abrir la puerta y verte, caminando hacia mí, con tu sonrisa radiante que ni la mascarilla es capaz de tapar, mirándome, repleta de sensualidad, con ese perfume que sabes que me encanta, hasta que llegas a mi altura y sonríes, amarrándote a mi cintura y besándome, sin querer separarnos, mordiéndome el labio, comenzando a sacar toda la pasión contenida. Arrancándonos las ropa antes de que se cierre la puerta, empotrándote contra la pared y mordiéndote el cuello, incendiándonos, encendiéndonos, tocándonos los cuerpos, masturbándonos, follando sucio y fuerte, llegando al orgasmo al mismo tiempo y una vez recuperados, acariciándonos desnudos, sencillos, sinceros, hablando de cómo arreglar el mundo, de una canción, de una movida del curro, de un viaje por hacer, de una cerveza que tomar, de un restaurante que visitar, de una playa en la que follar desnudos. Siendo nosotros. 

Y entonces mee he dado cuenta que lo único que les puedo pedir es que sigamos como hasta ahora, haciéndonos crecer día a día, olvidando el miedo, haciéndonos reír a carcajadas, siendo libres, siendo nosotros. 


"Mírame a los ojos, y dime que sí, y cierra la puerta. Estando contigo me como las horas, durmiendo contigo, pegándome a ti, al compás de una nota..."

No hay comentarios:

Publicar un comentario